Tal vez algún ancestral amancebamiento protomórfico indescriptible entre el durmiente de R'lyeh y la diosa egpcia Bast pudiera haber engendrado en la raza felina cierto desorden genético aberrante que perdura hasta nuestros días. Por eso no debe ser extraño encontrar seres de naturaleza híbrida pululando por los tejados de los puertos, maullando al mar para llamar a su padre.
Mininos diabólicos...
Miaaaauuuu, miaaauuuuu, miaaaGGGROOOOARGHFF!!