Confesión

- Sé que pensarán que estoy loco caballeros pero sucedió tal y como se los he relatado. La criatura era inmensa, se los juro. Aún tengo pesadillas con las imágenes que han quedado grabadas para siempre en mi cerebro. ¡Qué horror! Una monstruosidad indescriptible. Nunca había dado crédito a semejantes cosas, pensaba que sólo eran supercherías indignas de hombres de ciencia como nosotros. Sin embargo, ahora no tengo duda de que esas creencias proceden de experiencias similares a la que yo he sido obligado a presenciar. Les aseguro que, a pesar de la frialdad de mis palabras, me asaltan escalofríos sin motivo y en más de una ocasión mi esposa, a la que inexplicablemente no veo desde hace dos semanas, me ha reprochado en momentos no muy lejanos mi falta de atención a lo que hago. A mí, que era conocido por mi capacidad de concentración y minuciosidad en mis actos. ¿A dónde habrá ido? Estoy sinceramente procupado. En fin, caballeros, como les decía, esa criatura surgida del Averno desmembró delante de mis ojos a dos personas. Yo tuve suerte y logré escapar arrastrándome entre las inmundicias de una cloaca. Como les he dicho, hace ya de eso dos meses. Con todo esto que les he relatado no quiero asustarles, tan sólo advertirles de que no estamos solos en el universo y que extraños y terribles seres procedentes de otras dimensiones o quizá de otros planetas pretenden destruir nuestra existencia.

(minutos más tarde)

- Señora, me temo que la solución al problema de su marido escapa a nuestras posibilidades. Nunca había presenciado una paranoia tan bien elaborada al tiempo que tan escalofriante. Dos hombres, señora, asesinó dos hombres de manera salvaje. No podemos sino recluirlo aquí por tiempo indefinido. Tal vez tengamos que entregarlo a las autoridades para que apliquen justicia. Lo lamento.

0 lectores en Miskatonic:

 
© Miskatonic.es | Plantilla creada por Chica Blogger | Imagen de Miskatonic.es creada por Petter Haggholm: "Escape from R'lyeh"